La moralidad es el conjunto de valores y normas impuestas por los adultos, por lo que el niño y la niña nacen siendo amorales, es decir, desconocen las normas y valores de la sociedad. Por eso necesita la ayuda del adulto para mostrarle los valores cívicos que le permitan convivir en una sociedad. Según la educación que le den los padres y madres, sus hijos/as tendrán unos valores u otros. Aquí también influye la sociedad y la cultura en la que esté integrado el niño/a.
Por todo esto, es importante inculcar al niño y la niña valores de respeto, tolerancia, paz… hacia otras culturas, otras religiones, etc. Debe saber que hay valores negativos o contravalores, como el egoísmo, el ansia de poder, el racismo, la violencia… para que luego, por sí mismo, sea capaz de diferenciar lo que está bien de lo que está mal.
Educar en valores es educar moralmente, los valores son los que enseñan a la persona a comportarse como tal. Educar moralmente tiene como objetivo prioritario acompañar al niño/a hacia una autonomía personal (capacidad de juzgar su propio comportamiento).
Algunos recursos para educar en valores serían el juego, el cuento, el teatro de títeres, los murales, cómics, etc.
En nuestras manos queda la adquisición de valores por parte del niño/a y, en consecuencia, su futuro comportamiento ante la sociedad.
CLARA ALONSO DE VEGA
CAROLINA ÁLVAREZ HERNÁNDEZ
CRISTINA CAL RAMÍREZ
IVÁN SÁNCHEZ ALBERTOS
CICLO FORMATIVO DE EDUCACIÓN INFANTIL
CURSO: 2º GRUPO: B
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